Madre de Pelé presenciará el funeral de su hijo con 100 años
El 29 de diciembre de 2022 ya quedará señalado siempre en el calendario como uno de los días más tristes para el mundo del fútbol. Su rey, Edson Arantes do Nascimento, más conocido como Pelé, falleció a los 82 años en São Paulo tras sufrir un cáncer de colon.
Kely, una de sus hijas, fue la encargada de anunciar la noticia a través de sus redes sociales y con una imagen y mensaje muy conmovedores. “Todo lo que somos es gracias a vos. Te amamos infinitamente. Descansa en paz”, escribió junto a una fotografía de toda la familia agarrando la mano de su padre.
Hay otro miembro de la familia que también vive este momento de manera especialmente trágica. Se trata de su madre, Doña Celeste Arantes. No se tienen demasiados datos de la progenitora del astro del fútbol pero el propio Pelé quiso homenajear a su madre el pasado 20 de noviembre, justo cuando cumplió 100 años.
En su cuenta de Instagram compartió dos fotografías en blanco y negro y unas bonitas palabras que quiso transmitir desde su ingreso en el citado hospital donde falleció. “Desde pequeño me enseñó el valor del amor y la paz. Tengo más de cien razones para estar agradecido por ser tu hijo. Les comparto estas fotos, con mucha emoción para celebrar este día. Gracias por cada día a tu lado, mamá“.
La familia se prepara ahora para dar el último adiós a Pelé. El cuerpo del futbolista será trasladado a Santos, donde tendrá lugar el velatorio, que será en el estadio de fútbol el próximo lunes.
Ese mismo día se realizará un cortejo fúnebre por las calles de la ciudad que coronó al jugador. Durante este recorrido está previsto que el féretro pase por la zona donde reside la madre de Pelé, antes de celebrarse la ceremonia íntima que dará sepultura al genio.
La madre de Pelé marcó la vida de su hijo, como todas, pero Celeste en especial. De acuerdo a la leyenda que sobrevuela al personaje, ella fue la persona que recibió una visita clave en los años 50. Waldemar do Brito, un cazatalentos, la convenció de que el pequeño Dico (el primer apodo de su infancia) dejara su trabajo en una fábrica de zapatos y se sumara a Santos. El resto es Historia.
Fuente: Mundo