Kanye West afronta una demanda por discriminación racial y acoso de parte de un exempleado
Los Ángeles (EE.UU.).- Un exempleado de Kanye West, ahora llamado Ye, demandó este martes al rapero estadounidense, a su marca de ropa Yeezy, y a Donda, la escuela privada que posee, por discriminación racial, acoso y despido injustificado, entre otros.
En una demanda presentada ante el Tribunal del Condado de Los Ángeles y obtenida por medios estadounidenses, Trevor Phillips, afroamericano, describe los abusos que sufrió por parte del cantante de ‘Flashing Lights’ desde que comenzó a trabajar con él en 2022 para su marca Yeezy.
Asegura que Ye trataba “considerablemente peor” a sus trabajadores negros con gritos y castigos, mientras que con el personal blanco no “levantaba el tono de voz”, y en el caso específico de Phillips afirma que el trato llegó a amenazas de violencia física y humillaciones públicas. Según la denuncia, Phillips estaba a cargo de la supervisión de un proyecto de cultivo de algodón como parte de un plan para desarrollar una comunidad sostenible, pero también formó parte del equipo de trabajo de la escuela privada de Ye.
El demandante cuenta que presenció numerosos comentarios antisemitas del rapero y que uno de los planes de West era construir una cárcel en la escuela en la que los niños pudieran estar encerrados.
El documento también narra una serie de excentricidades del artista, como que obligaba a sus trabajadores a ver sin volumen la película de ‘Batman’ mientras él fingía que se masturbaba, o que les hablaba de hacer orgías. Phillips, según la demanda publicada por medios como Variety o Los Angeles Times, también comenta que en mayo de 2023 fue humillado públicamente y despedido frente a más de cien personas.
Tras pedir perdón, el rapero accedió a darle “otra oportunidad». En la demanda, Phillips solicita una indemnización por daños y perjuicios superior a 35.000 dólares, además de una orden judicial que prohíba a West poseer y dirigir una escuela.
En abril de 2023 West también recibió una demanda por discriminación racial por parte de dos exprofesoras afroamericanas que aseguraban haber sido despedidas injustamente.