“Canadá no está en venta”: Un Movimiento Contra la Propuesta de Trump para Incorporar al País como el Estado 51 de EE.UU.
Un creciente movimiento en Canadá, bajo el lema “Canadá no está en venta”, se ha levantado en respuesta a la polémica propuesta del expresidente estadounidense Donald Trump de convertir a Canadá en el estado 51 de los Estados Unidos. La iniciativa, que ha generado una fuerte oposición en todo el país, ha sido rechazada por un abrumador 90% de los canadienses, quienes ven esta sugerencia como una amenaza a su soberanía y autonomía.
En un acto de protesta, ciudadanos y empresas canadienses han iniciado un boicot a los productos estadounidenses, como una forma de manifestar su desacuerdo con las acciones de Trump. Además, el conflicto ha escalado cuando Trump anunció un arancel del 25% a las exportaciones canadienses, medida que busca presionar a Canadá en medio de las tensiones comerciales entre ambos países.
Ante esta medida, la exviceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, respondió con firmeza al proponer un arancel del 100% sobre los productos estadounidenses como represalia. “Si quieren jugar duro, nosotros también podemos hacerlo”, afirmó Freeland, reforzando el sentimiento de unidad y resistencia en la población canadiense.
El lema “Canadá no está en venta” ha tomado fuerza en todo el país, especialmente con la creación de una gorra que ha sido popularizada por los empresarios Liam Mooney y Emma Cochrane. La prenda, que rápidamente se ha convertido en un símbolo de protesta, lleva el mensaje claro de que Canadá no está dispuesto a ceder ante las presiones externas y que su identidad y autonomía son innegociables.
Este movimiento ha unido a los canadienses en un esfuerzo por proteger sus intereses y reafirmar su independencia frente a las políticas intervencionistas de EE.UU. El futuro de las relaciones entre ambos países sigue siendo incierto, pero el mensaje de los canadienses es claro: “Canadá no está en venta”.