El método con el que China hizo llover para enfrentar su peor temporada de calor
La práctica consiste en lanzar varillas de yoduro de plata a las nubes, para hacer más pesada la humedad e incentivar a que llueva más rápido. Y es que el calor extremo superó los 70 días, una cifra nunca antes vista.
Cientos de industrias pararon sus operaciones durante casi una semana en agosto por las altas temperaturas. Incluidos proveedores de grandes compañías como Totoya, Foxconn y Tesla.
Esa fue la situación que se vivió en la provincia china de Sichuan, pues las hidroeléctricas llegaron a menos de la mitad de sus niveles por la ola de calor que azotó al país entre junio y agosto. En consecuencia, las autoridades locales tuvieron que regular la energía y comenzaron por las industrias. Así de fuerte fue el calor que vivió China y que, además, rompió el récord de 2013, cuando la temporada duró 62 días continuos según la administración meteorológica.
Por eso, las autoridades chinas implementaron de nuevo una técnica que han usado desde hace 60 años. En la provincia de Hubei, en el este del país, lanzaron pequeñas varillas de yoduro de plata a las nubes. Estas ayudan a formar cristales de hielo para que la humedad sea más pesada y, así, incentivar que llueva más rápido.
Y es que China tiene el mayor programa del mundo para modificar el clima y ha experimentado con ingeniería meteorológica desde 1958. De hecho, esta misma técnica la usaron en los Juegos Olímpicos de Beijing para acelerar la lluvia y garantizar un tiempo seco en la clausura de las justas.
Recientemente, el Consejo de Estado trazó que para 2025 cubrirán 5,5 millones de kilómetros cuadrados con su programa. Es decir, más de la mitad de toda China y un área más grande que India. De esta manera, las autoridades chinas intentan combatir los extremos climáticos aunque, por otro lado, la sequía aceleró la industria del carbón que es, precisamente, una de las más contaminantes.