Genio a sus de 11 años, niño con autismo tiene un coeficiente superior al de Stephen Hawking y Albert Einstein

La historia de Kevin Sweeney ha cautivado no sólo a su comunidad, sino a nivel mundial; a sus 11 años hizo un test de coeficiente intelectual el pasado 16 de julio en Edimburgo, Escocia y el resultado sorprendió tanto a sus padres como a los examinadores: obtuvo una puntuación de IQ de 162.

El niño genio tiene un coeficiente intelectual que lo ubica entre el uno por ciento de las personas del mundo. De acuerdo a mediciones internacionales, los IQ que se ubican hasta los 109 puntos se consideran normales, pero con una puntuación de 162, Kevin superó tanto a Albert Einstein como al físico Stephen Hawking, quienes estarían en los 160.

Dada su calificación de 162, Kevin Sweeney fue invitado a unirse a Mensa, la prestigiosa sociedad que admite únicamente a aquellos de más alto coeficiente intelectual.

“Kevin sacó el puntaje más alto para alguien de su edad. No había otros niños tomando el test de IQ ese día y eran todos adultos. Creímos que podría sentirse abrumado entre tantos adultos, pero él estaba hablando con la gente y le decía ‘hola, soy Kevin’ a todo el mundo”, contó su padre Eddie Sweeney de 40 años.

“Es increíble que estemos tan orgullosos y Kevin está muy feliz”, resaltó Eddie padre de cuatro hijos, de Lochgelly, un pueblo ubicado en Fife, Escocia. Tanto él como su madre, Laura, siempre dijeron que “Kevin era un genio”, aunque aclararon que fue decisión del muchacho hacer la prueba.

“Su madre y yo hicimos el examen hace unos años solo porque amamos los cuestionarios y queríamos desafiarnos a nosotros mismos. Kevin realmente quería hacerlo con nosotros, pero era demasiado joven”, dijo.

La inteligencia de Kevin ya se había demostrado ante su fanatismo por los programas de preguntas y respuestas donde solía contestar correctamente los cuestionarios más complicados. Además, contó que antes de empezar la escuela primaria ya sabía leer y a sus 11 años “leyó todos los libros de Harry Potter”.

Su padre, quien es un instructor de educación física en el servicio penitenciario, dijo que “le sorprende” lo que Kevin es capaz de hacer. “A los seis años conocía la tabla periódica después de una semana y la gente lo ponía a prueba“, dijo. “Le pedían un número y él les podía decir qué era, cuál era el símbolo y cuánto pesaba el elemento”.