Este plan busca evitar que las grandes empresas alimentarias aumenten injustificadamente los precios, parte de su estrategia para combatir la inflación
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, propondrá este viernes en Carolina del Norte una prohibición federal de la manipulación de precios de los alimentos en su primer discurso de política económica como aspirante demócrata a la Casa Blanca.
Esa prohibición busca impedir que las empresas del sector alimentario aumenten injustificadamente los precios y forma parte de un plan más amplio de la vicepresidenta para combatir la inflación, informó la campaña de Harris en un comunicado.
Según la campaña, en sus primeros 100 días como presidenta, Harris tiene intención de implementar la primera prohibición federal a la especulación de precios de alimentos, estableciendo normas claras para que las grandes corporaciones no puedan alzar sus precios de manera artificial para obtener grandes beneficios.
De implementarse, el plan permitiría a los fiscales generales de los estados y a la Comisión Federal de Comercio, una agencia gubernamental que defiende los derechos de los consumidores, investigar y sancionar a las empresas que violen esa prohibición federal.
Además, el plan recoge inversiones para que el Gobierno federal pueda combatir prácticas anticompetitivas y fondos para apoyar a las pequeñas empresas de la industria alimentaria, incluidos los procesadores de carne independientes, ya que este sector está actualmente dominado por grandes corporaciones.