Hombre de California es acusado de contrabandear más de 1.700 reptiles a EEUU
Un hombre del condado de Ventura, sur de California, fue acusado de importar ilegalmente a Estados Unidos más de 1.700 reptiles, incluyendo 60 especímenes que fueron hallados escondidos en su ropa el mes pasado en la frontera con México, informó este viernes el Departamento de Justicia (DOJ).
José Manuel Pérez, alias Julio Rodríguez, de 30 años y residente de Oxnard, enfrenta un cargo de conspiración, nueve cargos de contrabando de bienes a Estados Unidos y dos cargos de tráfico de vida silvestre. Se espera que le sean leídos los cargos el 28 de marzo en la Corte de Distrito de Estados Unidos en Los Ángeles.
Su hermana, Stephany Perez, de 25 años y también de Oxnard, está acusada igualmente de conspiración y se espera que le sea leída la acusación en las próximas semanas.
La acusación añade cargos y sustituye una acusación previa originalmente formulada el 24 de febrero.
La nueva acusación incluye 14 actos relativos al cargo de conspiración, incluyendo que José Manuel Pérez pasó de México a Estados Unidos en auto a través del Puerto de Entrada de San Ysidro el 25 de febrero con aproximadamente 60 reptiles, incluyendo docenas de lagartos y cuatro serpientes, escondidos en los bolsillos de su chaqueta y pantalones, en el área de la entrepierna y en las piernas de sus pantalones.
Después de negar inicialmente ante los oficiales aduanales que tuviera algo que declarar, Pérez les dijo posteriormente que “los animales eran sus mascotas”, indicó el DOJ en un comunicado.
De acuerdo con la acusación, de enero de 2016 a febrero de 2022, los hermanos Pérez y sus cómplices usaron las redes sociales para comprar y negociar los términos de la venta y la entrega de los animales en Estados Unidos.
Los animales -que incluían tortugas de caja, cocodrilos bebés y lagartos de chaquiras- presuntamente eran importados a Estados Unidos desde México y Hong Kong sin los permisos requeridos por la Convención de Comercio Internacional de Especies en Peligro (CITES).
Si son hallados culpables, los acusados enfrentarán una sentencia máxima de cinco años en una prisión federal por el cargo de conspiración. José Manuel Pérez enfrentaría además una sentencia máxima de 20 años de cárcel por cada cargo de contrabando y cinco años de prisión por cada cargo de tráfico de vida silvestre.