Las desgarradoras palabras de una niña de 5 años víctima de bullying

«¡Dios, llévame al cielo!», pide Agustina llorando desde que inició su vida escolar, según cuenta entre lágrimas su papá.

La angustia de la pequeña, que está por cumplir sus 6 años, es de toda la familia, que no encuentra la forma de ayudarla ni qué hacer para que vuelva a ser una niña alegre y dulce como era hasta hace poco más de un año.

Agustina se convirtió en una niña solitaria desde que comenzó a ser hostigada en el centro escolar donde estudia. A veces se muestra enojada y no responde cuando le preguntan qué le pasa.

“Ya el año pasado le decían cosas en el jardín, pero por ahí como era más chica no se daba cuenta pero ahora sí y le duele lo que escucha. Todos los días regresa a casa llorando, enojada, nos pide no ir más a la escuela y dice que se quiere ir al cielo. Nos enteramos que este no es el primer caso de maltrato en la escuela, hay nenes que hasta son golpeados por sus compañeros”, cuenta Juan Carlos Palma (45), padre de la infante

El progenitor cuenta que la niña no decía nada de lo que sufría en la escuela. Al iniciar el primer grado, su familia la vio entrar llorando y molesta a su residencia, y tiraba su mochila.

Dice que Agustina dejó de ver dibujitos como hacía antes de ir a la escuela y solo sale a jugar cuando es sola. Además, su carácter cambió

«Cada vez que le preguntaban qué pasaba, la nena se negaba a hablar y su familia comenzó a preocuparse. Fue su hermana Sara, de 18 años, la que logró que pudiera contar el motivo de su sufrimiento», indicó el padre.

«Dijo que en la escuela se ríen de ella, que le dicen ‘gorda cerda’, ‘gorda chancha’, ‘gorda puta’… ¡Tiene cinco años y tiene que escuchar todo eso!”, reclama Juan Carlos quebrantado por la situación.

En un intento de buscar una solución, su madre Verónica la grabó narrando las cosas que le dicen sus compañeritos en la escuela y compartió el video con sus hermanas. Fue una tía de la infante quien decidió subir el video a las redes y se hizo viral de inmediato.

“No quiero ir más a la escuela. Me dicen gorda. Me tratan de gorda chancha, estoy cansada. Me tienen harta”, se queja Agustina entre llantos.

Después de que se difundiera la grabación, la pequeña no asistió al centro escolar. No ir le da tranquilidad, sintiéndose mejor en la seguridad que le ofrece su casa. No ir le da tranquilidad, sintiéndose mejor en la seguridad que le ofrece su hogar.

«Se siente mejor estando en casa, pero basta mencionar la escuela para que se ponga mal. Se encierra. Esto es para nosotros un proceso difícil y como papá se me parte el corazón de ver a mi hija así y de saber que esté padeciendo tanta crueldad”, expresa Juan Carlos.

El hombre recuerda que la menor llegaba el pasado año del jardín, pedía el celular y se quedaba sola viendo los dibujitos y no decía nada.

Cree que por ese día es que comenzó el hostigamiento en contra de su hija, por lo que pidió ayuda a la escuela