Racismo. Desalojaron a migrantes de la prisión flotante en Reino Unido tras encontrar bacteria mortal a bordo

Este brutal sistema de encarcelamiento de migrantes, cuestionado por organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, y que fue señalado por los propios solicitantes de asilo como «entrar a Alcatraz», quedó al desnudo este viernes tras la denuncia de contener el agua altos niveles de legionela, obligando a su evacuación.

CODIGO TV. Al menos 39 solicitantes de asilo que habían sido encerrados esta semana en la prisión flotante Bibby Stockholm, en aguas del sur de Inglaterra, han tenido que ser desembarcados después de que unas muestras del sistema de agua del barco hallaran altos niveles de legionela. Esta bacteria puede causar infección pulmonar grave.

La embarcación, pensada para hospedar a unos 500 solicitantes de asilo, tiene tres pisos y está compuesta por 222 camarotes.

El lunes habían empezado a ser alojados los primeros migrantes, todos varones, y estaba prevista la llegada de más en las próximas semanas, como parte de la política antiinmigrante del Gobierno conservador británico.

El ejecutivo de Rishi Sunak viene de impulsar una dura ley contra los solicitantes de asilo para permitirle «deportar en caliente» a los migrantes que llegan cruzando el Canal de la Mancha o mantenerlos en terceros países mientras que analizan sus solicitudes.

Una de las propuestas, de momento trabada en la justicia, es la de enviar a los migrantes a Ruanda, mientras que otra de las opciones barajada por el Gobierno es la de enviarlos a la isla de Ascensión, a más de 6000 kilómetros de Reino Unido.

Hasta tanto se resuelvan algunas de esas opciones, todas ominosas para los los solicitantes de asilo que vienen de huir de guerras, hambrunas o redes de trata en sus países, el Gobierno británico los había empezado a encerrar en el Bibby Stockholm, con capacidad para 500 personas.

Este brutal sistema de encarcelamiento de migrantes, cuestionado por organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, y que fue señalado por los propios solicitantes de asilo como «entrar a Alcatraz», quedó al desnudo este viernes tras la denuncia de contener el agua altos niveles de legionela, obligando a su evacuación.

El director de los derechos de migrantes y refugiados de la organización humanitaria Amnistía Internacional (AI), Steve Valdez-Symonds, había criticado esta semana la medida al indicar que se trata de «una forma completamente vergonzosa de albergar a personas que han huido del terror, el conflicto y la persecución.».