Condenan a tres hermanos por estafa a través de falsa empresa de inversiones
La jueza Wendy Polanco, de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia de Santo Domingo Oeste, dictó sentencia condenatoria contra tres hermanos, acusados de estafar a 27 personas con la suma de 46 millones de pesos, a quienes convencían de invertir con la falsa promesa de retornarles atractivas ganancias de hasta un 12 % mensual al capital invertido, a través de la empresa Bull Tranding, S.R.L., ubicada en el municipio de Los Alcarrizos.
La Procuraduría General de la República informó que la jueza acogió las pruebas presentadas por el Ministerio Público para aplicar la sentencia de dos años de prisión contra New Starlyn Toribio Cruz y Wendolyn Magdalena Toribio Cruz y seis meses de prisión a Maverick Wendilai Toribio Cruz por estafar a las víctimas.
El tribunal también ordenó a los condenados la devolución de los montos estafados por la suma de 46 millones de pesos y al pago de una indemnización de 30 millones de pesos en favor de la parte querellante.
El fiscal de investigación, José Lenin Hernández, estableció en la acusación contra los hermanos Toribio Cruz, que los mismos, a través de maniobras fraudulentas y haciéndose pasar como especialistas en áreas financieras y administradores de capitales, estafaron a las víctimas en este proceso penal, utilizando el nombre de la sociedad comercial Bull Tranding, S.R.L., para generar confianza en los depositantes.
El documento judicial también resalta la manera en que los procesados clasificaban y captaban a sus víctimas, los cuales eran seleccionados en las iglesias, en sus lugares de trabajo y buscaban determinados perfiles de personas que no representaran un problema para ellos.
De acuerdo con la acusación, la propuesta inicial realizada por los judicializados a las víctimas era que con sus inversiones obtendrían beneficios que oscilaban entre un 12 y 15 por ciento mensual por el capital entregado, para un promedio de ganancias de aproximadamente un 144 % en un año, a partir del capital invertido.
Las acciones cometidas por los acusados constituyen una violación al artículo 405 del Código Penal Dominicano.
Los condenados deberán cumplir sus sentencias condenatorias en los Centros de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres y Mujeres, en la provincia de San Cristóbal.