Marco Rubio elogia a la República Dominicana como modelo de liderazgo en América Latina
En un gesto que ha resonado tanto en Washington como en Santo Domingo, Marco Rubio, nominado por Donald Trump como secretario de Estado de los Estados Unidos, describió a la República Dominicana como un modelo a seguir en la región. Durante sus declaraciones, Rubio destacó el liderazgo y los avances económicos del país, especialmente su rápida recuperación tras los efectos de la pandemia.
Un ejemplo en recuperación económica y turismo
Rubio subrayó las estrategias implementadas por el país caribeño para revitalizar su economía luego del impacto de la COVID-19. Estas medidas permitieron una recuperación acelerada del turismo, sector que representa uno de los principales motores económicos de la nación. Según Rubio, este éxito demuestra la capacidad de la República Dominicana para superar adversidades y posicionarse como líder en la región.
Opiniones de los senadores dominicanos
En Santo Domingo, las declaraciones de Rubio generaron reacciones entre los legisladores dominicanos. Rafael Duluc (Cholitín) enfatizó que los logros del país son fruto de un esfuerzo colectivo acumulado durante más de dos décadas. “Este progreso no pertenece solo al actual gobierno del PRM. Es el resultado de políticas de gobiernos anteriores, el dinamismo del sector empresarial y la confianza de los inversionistas extranjeros”, destacó Duluc.
Por su parte, Ricardo de los Santos resaltó la importancia de que Rubio no solo elogie los logros del país, sino también reconozca los retos que enfrenta, particularmente en lo relacionado con la situación de Haití. “Es fundamental que se considere el impacto de nuestra cercanía a Haití, una nación con enormes desafíos humanitarios y políticos”, señaló el legislador.
Desafíos y liderazgo regional
En sus declaraciones, Rubio reconoció los desafíos que enfrenta la República Dominicana debido a su proximidad con Haití. Sin embargo, elogió la firmeza y responsabilidad con la que el país ha manejado la situación, consolidándose como un ejemplo de liderazgo en América Latina. Según Rubio, la República Dominicana demuestra que, incluso en circunstancias difíciles, es posible avanzar con determinación y visión estratégica.
La valoración de Rubio refuerza la posición de la República Dominicana como un país clave en el Caribe y un aliado estratégico para los Estados Unidos, especialmente en temas de desarrollo económico y estabilidad regional.
