Ayuda! Pareja con niños discapacitados vive debajo de una lona en El Seibo
Una lona sirve como refugio a una familia de escasos recursos afectada por el colapso de su vivienda por las lluvias, ubicada en el paraje Las Agustinas, próximo a la comunidad de San Francisco Vicentillo, provincia El Seibo.
La familia vive en extrema pobreza en un lugar improvisado, levantado con algunos palos viejos, zinc y cubierto con una lona. Además, la improvisada vivienda tiene piso de tierra y es poco segura.
El interior sólo cuenta con una cama llena de hoyos y deteriorada, un pequeño abanico, varias ollas, un tanque y una bacinilla. No tiene energía eléctrica y se encuentra retirada de la comunidad.
Olga Cedeño, quien vive con su esposo Rafael Batista y sus cuatro hijos menores de edad (dos de ellos con discapacidad), contó que no tienen otro lugar donde vivir, por lo que tuvieron que habilitar ese espacio como pudieron.
Esto era una casita de tabla, normal, pero con las lluvias se fue deteriorando y cayéndose y no nos quedó de otra que ponerle esa lona arriba y cubrirlo un poco para que nuestros hijos pudieran dormir ahí»
Cedeño manifestó que dos de sus hijos necesitan asistencia médica urgente, puesto que de un momento a otro dejaron de caminar y por los pocos recursos no han podido volver a llevarlos a un centro de salud.
“Nosotros lo estábamos llevando al médico y a uno de ellos lo refirieron a un hospital de Santo Domingo para operarlo y cuando llegó la pandemia no pudimos llevarlo y está así ahí, no sabemos qué le ha ocasionado esa parálisis. Ellos no pueden estar de pie, porque de una vez se debilitan y se caen”, lamentó la señora.
Aseguró que sólo cuentan con una silla de ruedas para poder desplazar a uno de sus pequeños, mientras que al otro, deben cargarlo, al tiempo que dijo que pese a su situación ninguna autoridad les ha “echado la mano”.
A veces no tienen para comer
Rafael Batista, esposo de Olga y padre de los cuatro niños, dijo que a veces no tienen ni para comer, ya que con la llegada de la pandemia se quedó sin un empleo fijo, donde pudiera asegurar la comida de su familia.
“Nosotros vivimos del trabajo que yo pueda hacer en el día y a veces lo que me gano son unos 500 pesos y eso no nos alcanza para nada, cuando tenemos cuatro niños y dos que deben ser alimentados bien, porque están enfermos”, subrayó Batista.
Dijo que algunos vecinos se han apiadado de su situación y les han ayudado con comida, ropa, medicamentos y otras necesidades.
Le hace un llamado al Gobierno y a las autoridades municipales para que los ayuden a mejorar su situación de vida. “Necesitamos que nos ayuden a hacer nuestra casita y que nuestros hijos puedan tener las atenciones médicas necesarias, a nosotros se nos hace difícil poder darles los alimentos a ellos y llevarlos a un centro de salud”, explicó.
Diario Libre se comunicó con la encargada social de la Asociación Dominicana de Rehabilitación, de la provincia El Seibo, Loren Feliciano, quien dijo que el caso le llegó recientemente y que a partir de mañana se estará trasladando hacia la comunidad para saber cuál es la situación y las necesidades de la familia.
“Nosotros iremos a ver las condiciones de salud de los niños y cuales cosas ellos necesitan, porque no tenemos a mano un diagnóstico médico de su estado de salud y eso es lo que vamos a investigar”, adelantó.
Comunicó que estará llevándoles algunos aportes que han hecho personas, luego de enterarse de las condiciones tan precarias en que vive la familia Batista Cedeño.