“Deteniendo el reloj: la prevención como escudo contra las enfermedades no transmisibles”
La prevención es fundamental para enfrentar el aumento de las enfermedades no transmisibles (ENT), como obesidad, diabetes, hipertensión y afecciones cardiovasculares, que causan 41 millones de muertes anuales a nivel global. Según los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la meta es reducir en un tercio la mortalidad prematura por ENT para 2030.
El sedentarismo es uno de los principales detonantes en regiones como Centroamérica y el Caribe, donde una gran parte de la población adulta no cumple con las recomendaciones mínimas de actividad física según la OMS. Además, hábitos como el consumo de tabaco y la mala alimentación agravan estos riesgos.
La doctora Ana Patricia Argueta destaca que optar por estilos de vida saludables, mantenerse activos, alimentarse bien y seguir controles médicos son acciones clave para prevenir estas enfermedades y mejorar la calidad de vida. La adherencia al tratamiento también es esencial para detener la progresión de las ENT, que representan una alta carga para las familias, los sistemas de salud y la sociedad.
